¿Cómo imprimir etiquetas? Todo lo que necesitas saber
Las etiquetas son elementos muy básicos que se emplean desde los tiempos remotos, sin embargo, ninguna tecnología o propuesta digital ha conseguido desbancarlas del todo. Nos ofrecen una gran practicidad para marcar los productos, para organizar diferentes artículos o tener un buen inventario en los negocios. Un sistema universal y clásico que nunca falla.
¿Tú también lo piensas y estás buscando la forma de imprimir tus propias etiquetas? ¡Pues has dado con el lugar indicado! En este artículo queremos explicarte cómo puedes hacerlo, con qué impresora te resultará más sencillo y en qué formato puedes hacerlo. Te ofrecemos una guía sencilla y útil con la que ganarás en autosuficiencia para ti o para tu negocio.
¿Qué impresora sirve para imprimir etiquetas?
Imprimir etiquetas puede ser de gran utilidad si tienes un pequeño negocio o si las empleas en tu día a día para organizar algunos artículos personales, por ejemplo, la ropa o los objetos de coleccionista. Hay personas que las usan con diferentes misiones, ¡son realmente eficientes!
Lo primero que debes saber para poder elaborarlas tú mismo es que existen diferentes tipos de impresoras de etiquetas o, al menos, diferentes modelos que te resultarán útiles para esta misión. Son los siguientes:
- Impresoras de brazaletes. Son pequeñas impresoras que se emplean para los típicos brazaletes que tienen una forma de cinta alargada y que se coloca en la muñeca. Por su tamaño y forma, pueden ser empleadas también para elaborar etiquetas.
- Impresoras industriales. En este caso hablamos de un opuesto, pues las industriales son de gran tamaño. Son las que se emplean a nivel profesional para elaborar un elevado volumen de etiquetas o para trabajar durante una jornada entera sin parar.
- Impresoras portátiles. Son equipos móviles que permiten ser empleados en diferentes ubicaciones con facilidad y tienen una conectividad muy elevada, pues pueden vincularse con medios sencillos como un USB.
- Impresoras de tarjetas. Son específicas para la elaboración de tarjetas de trabajo o de presentación y permiten crear etiquetas de idénticas dimensiones.
Las impresoras de etiquetas también se pueden diferenciar según su tecnología de impresión. Es algo que se puede dividir en dos grandes grupos y que te conviene conocer, especialmente, si buscas una máquina para tu negocio. Son las siguientes:
- Transferencia térmica (TT). Funcionan mediante una cinta con propiedades de alta sensibilidad al calor. Permite que la tinta se impregne adecuadamente al papel, sin que este sea termosensible.
- Transferencia térmica directa (TD/DT). En este caso contienen un cartucho cuyo material es termosensible. El cabezal de la máquina va a generar temperaturas elevadas sobre el papel, que también será susceptible al calor, para crear la imagen a elección.
¿Qué formato se usa para imprimir etiquetas?
Lo cierto es que el formato de las etiquetas puede ser a elección de cada empresa o usuario, pues existe una gran variedad de ellas con diferentes objetivos, tamaños y con más o menos dificultad en el diseño. Al final, resulta algo bastante particular.
Si nos ceñimos a las generalidades, lo primero que se debe hacer es contar con la imagen en PDF, por un lado, y el JPG o PNG, por otro lado. De esta forma, tendrás la imagen en diferentes archivos y con varias compatibilidades. Sin embargo, el PDF es compatible con prácticamente todas las opciones de impresión.
En cuanto al formato de impresión, también nos toparemos con cantidad de gustos y usos. Es normal encontrar etiquetas en A6 PDF 10×15 cm / 4×6 pulgadas, en A4 PDF o en A6 ZPL 10×15 cm / 4×6 pulgadas. Este último permite la impresión en ZPL cuando se emplean impresoras térmicas para elaborar los artículos de los que hablamos.
¿Qué material se usa para imprimir etiquetas?
El material de impresión también permite adaptarse a los gustos, pero, ¡cuidado!, también va a depender en gran medida de la tecnología de impresión que se decida emplear. Como ya hemos visto, las máquinas que emplean Transferencia térmica directa (TD/DT) funcionarán de manera eficiente solo con papel termosensible, y este será el material que tendrás que emplear.
Sin embargo, para las etiquetas que van a ser adhesivas o van a ir colgadas en un producto, es muy común que se use el papel estucado, también llamado papel couché. Se trata de un material bastante versátil que se puede obtener en versión lisa, satinada, brillante o mate según el gusto de cada usuario. Lo que permite es que se pueda dotar de personalidad a cada etiqueta, y que se pueda emplear cola o adhesivo en caso de ser necesario.
¿Puedo imprimir etiquetas en una impresora normal?
Las impresoras domésticas o de oficina también pueden ser válidas para imprimir etiquetas en algunos casos determinados. Esto es especialmente útil si solo vas a usar las etiquetas para funciones personales o necesitas un número muy concreto de ellas. No es lo que se recomienda para los negocios que las emplean constantemente o para el uso industrial.
Con la impresora que tengas para tu uso particular podrás sacar etiquetas de 10×10 si empleas hojas de cartas de a una o a cuatro, un método para sacar toda la rentabilidad a una misma hoja de papel.
El resultado puede ser suficiente para una sentada, aunque no es lo más adecuado para lograr un aspecto realmente profesional. Hoy en día, las máquinas que generan etiquetas como las previamente citadas en este artículo, son muy versátiles y te permiten elaborar cantidad de unidades con rapidez e incorporando las medidas, colores o especificaciones que prefieras.